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Dra. Gala León

TIPOS DE MANCHAS EN LA PIEL

Tanto si es en la cara como en cualquier otra parte del cuerpo, las manchas en la piel son una constante preocupación. Las razones de su aparición son muchas, desde cambios hormonales hasta la exposición al sol.  

Hoy os traemos una pequeña recopilación de los distintos tipos de manchas o imperfecciones oscuras que pueden aparecer en nuestra piel. 

  • Lunares o nevus

Un lunar común es un tumor en la piel que se forma cuando las células pigmentadas (melanocitos) crecen agrupadas. La mayoría de los adultos presentan de 10 a 40 lunares comunes. Estos tumores, usualmente, se encuentran arriba de la cintura en zonas expuestas al sol. Rara vez se encuentran en el cuero cabelludo, en los senos o en los glúteos.

Aunque la mayoría de los lunares comunes pueden estar presentes desde el nacimiento, usualmente aparecen más tarde en la niñez. Los lunares siguen formándose en la mayoría de las personas hasta cerca de los 40 años de edad. En las personas de mayor edad, los lunares comunes tienden a desaparecer.

Otro nombre para un lunar es nevus o nevo. El plural es nevi o nevos. 

Son planas, aunque pueden presentar relieves y tienen distintas tonalidades.  Necesitan revisión obligatoria por parte del dermatólogo ya que muchas de las manchas pueden ser peligrosos y evolucionar a un melanoma. 

  • Manchas en la piel por edad o léntigo simple 

Son manchas marrones o de color parduzco oscuro, en general de pequeño tamaño, entre 1 y 5 mm. Aparecen después del nacimiento y con frecuencia desaparecen en la edad adulta. No se deben a la exposición al sol.
No suelen suponer un problema, únicamente pueden parecer poco estéticas, aunque tras su aparición conviene que un dermatólogo las revise para descartar riesgos. 

  • Manchas solares o léntigo solar 

Suelen tener forma de lenteja, suelen tratarse de manchas de color marrón más claro y de mayor tamaño, en ocasiones con la piel rugosa en su superficie. Aparecen en zonas expuestas al sol, fundamentalmente en la cara y las manos. Son muy similares a las manchas de la edad, pero su razón es el sol. Son planas, pero con el borde muy nítido y marrones claras. Pueden confundirse a veces con las pecas por su tamaño, para evitar su aparición se recomienda siempre la protección solar alta. 
Léntigo solar, actínico o senil. 

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